Calor
Hace un frío de morirse. Y aunque me la pase triste, siempre vuelvo a ser feliz, con todo el amor que recibo, con todas las personas tan hermosas que me rodean, mi cuerpo se relaja y respiro AMOR. Es difícil, siempre lo fue. Lo supe desde que tenía 5 años y me di cuenta que me sentía diferente, que no era como los demás. Me hicieron sentir diferente y me callaron, por ignorancia, por miedo, por lo que sea, yo me sentía el ser más solitario del mundo, y lo estaba. Lloraba en silencio por las noches, planeaba como sobrevivir, como cambiar lo que sentía por dentro. Amar a otro chico. Tan simple. La infancia de las personas LGBTIQ+ sigue siendo dolorosa y difícil, a pesar de vivir en una megalópolis como Buenos Aires, todavía es complicado, y me toco vivirlo en primer plano. El rechazo, la vergüenza, el miedo. Pero hoy, tengo 21 años y tengo personas que me aman, eso me da tanta fuerza, revivir todo esos dolores del pasado y hacerlos parte de mi historia, es tan doloroso, pero a...