At last
Hace tiempo quiero escribir, me encontraba (quizá) sin las palabras adecuadas o la forma de expresar lo que viene pasando este ultimo tiempo.
El año que paso fue un año puramente de sensaciones, de despedidas. Me encontré fuertemente en discusiones conmigo mismo, con decisiones.
En el mes de noviembre, murió mi abuela, la mamá de papá, esa persona que siempre me dio cariño, una sonrisa; a pesar de sus problemas, conmigo siempre fue excelente, y más de una vez me regalo palabras de aliento y amor. Fue la primera persona que se me fue, y a pesar de tener un dolor, una nostalgia en el pecho, me siento dichoso de haber disfrutado de su compañía hasta sus 80 y tantos años. La voy a extrañar mucho.
Me encuentro descubriéndome, armándome, esto ya no es algo que me preocupa, sinceramente vivo como quiero y como se da, y a la par voy siendo yo, a veces un poco más, otras un poco menos.
Miro atrás, los recuerdos, y me río; una cara de mi que nunca voy a poder cambiar, ni olvidar, ese personaje teatral, esas locuras. No me arrepiento de nada.
El amor...qué bizarro me parece todo ahora, cosas que busque, espere, encontré, deseche, nunca me iba a sentir bien con algo así, o por lo menos, no por ahora; disfruto de mi sexualidad, del calor, de alguna que otra personita y me siento muy bien así. Por el momento, quiero que siga.
Mis amigas, algunas con las cuales pensé compartir muchos años más, hoy parecen estar tan lejos, y aunque algunas noches las extraño, otras me encuentro muy cómodo sin su ritmo de vida. Con otras personas, que hace años venimos construyendo una amistad, siguen formando parte de mi vida y las quiero conmigo.
Trato de tomar decisiones, de ser con quien yo me siento cómodo, de construir lazos fuertes con personas que quiero seguir teniendo en mi vida, de divertirme, de aprender, de descansar, de disfrutar las cosas que a veces no quiero, porque a pesar de forzar muchas cosas, otras suceden con la vida, y me encanta todo esto, a pesar de las espinas, amo.
El año que paso fue un año puramente de sensaciones, de despedidas. Me encontré fuertemente en discusiones conmigo mismo, con decisiones.
En el mes de noviembre, murió mi abuela, la mamá de papá, esa persona que siempre me dio cariño, una sonrisa; a pesar de sus problemas, conmigo siempre fue excelente, y más de una vez me regalo palabras de aliento y amor. Fue la primera persona que se me fue, y a pesar de tener un dolor, una nostalgia en el pecho, me siento dichoso de haber disfrutado de su compañía hasta sus 80 y tantos años. La voy a extrañar mucho.
Me encuentro descubriéndome, armándome, esto ya no es algo que me preocupa, sinceramente vivo como quiero y como se da, y a la par voy siendo yo, a veces un poco más, otras un poco menos.
Miro atrás, los recuerdos, y me río; una cara de mi que nunca voy a poder cambiar, ni olvidar, ese personaje teatral, esas locuras. No me arrepiento de nada.
El amor...qué bizarro me parece todo ahora, cosas que busque, espere, encontré, deseche, nunca me iba a sentir bien con algo así, o por lo menos, no por ahora; disfruto de mi sexualidad, del calor, de alguna que otra personita y me siento muy bien así. Por el momento, quiero que siga.
Mis amigas, algunas con las cuales pensé compartir muchos años más, hoy parecen estar tan lejos, y aunque algunas noches las extraño, otras me encuentro muy cómodo sin su ritmo de vida. Con otras personas, que hace años venimos construyendo una amistad, siguen formando parte de mi vida y las quiero conmigo.
Trato de tomar decisiones, de ser con quien yo me siento cómodo, de construir lazos fuertes con personas que quiero seguir teniendo en mi vida, de divertirme, de aprender, de descansar, de disfrutar las cosas que a veces no quiero, porque a pesar de forzar muchas cosas, otras suceden con la vida, y me encanta todo esto, a pesar de las espinas, amo.
Comentarios
Publicar un comentario